​​Alta resistencia a los impactos, 200 veces más fuerte que el vidrio y 30 veces más fuerte que el acrílico, transparencia “como el agua” intrínseca, estabilidad dimensional a temperaturas elevadas, resistencia a las llamas, cumple la normativa de la FDA, resistencia a las condiciones climatológicas, formabilidad. Buen aislante eléctrico, acústico y térmico.